Miércoles 3 de septiembre de 2025.- En un nuevo hito para la transición energética de Chile, el Centro Nacional de Pilotaje (CNP) validó en condiciones reales la viabilidad técnica y los beneficios ambientales de la primera caldera híbrida en Chile que combina hidrógeno verde (H2v) y gas licuado de petróleo (GLP).
Esta innovación tecnológica fue desarrollada por las empresas SunSolution y Reduze, con apoyo financiero de Corfo y Lipigas, e implementada en la Minera San Pedro, ubicada en Til Til. Según explicó Matías Castro, gerente técnico del CNP, la prueba efectuada permitió corroborar que al sustituir el 50% del GLP por hidrógeno, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) disminuyeron en 50%, tal como se esperaría teóricamente y con el objetivo de no mermar la eficiencia de combustión del GLP.
"Este hito confirma la viabilidad técnica y ambiental del uso de mezclas H2-GLP en calderas industriales, constituyendo un punto de inflexión para la transición energética, ya que permite operar con distintos porcentajes de hidrógeno sin depender de un único suministro y marcando un avance concreto hacia la descarbonización de procesos productivos," destacó.
Andrés Guerrero, gerente general de Minera San Pedro, señaló que "además de haber confirmado el buen funcionamiento de esta tecnología es muy valioso el aprendizaje en el uso de hidrógeno verde, tanto en la operación como el mantenimiento. Finalmente, el uso de nuevas tecnologías limpias no es viable sin una correcta operación y mantenimiento"
Innovación: quemador dual
El principal aporte tecnológico de la caldera radica en un quemador dual, capaz de realizar la mezcla de combustibles directamente en el sistema, sin necesidad de un tanque de premezcla. Este sistema aporta flexibilidad y escalabilidad, ya que permite adaptar la tecnología a distintos tipos de calderas con mínima intervención.
Las pruebas de validación se realizaron en condiciones operativas, comparando emisiones de dióxido de carbono (CO2), oxígeno (O2) y óxidos de nitrógeno (NO?) bajo dos escenarios: combustión con GLP puro y con una mezcla 50%-50% de hidrógeno y GLP.
Las mediciones se realizaron mediante un sensor de gases avanzado, que calculó las emisiones de CO2 y se monitorearon las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), a partir de los datos obtenidos. Para asegurar la representatividad de los resultados, las pruebas se llevaron a cabo en dos niveles de potencia: 100 kW y 150 kW.
Escalable y replicable
Desde SunSolution resaltaron que el pilotaje exitoso de esta caldera híbrida demuestra que la tecnología es escalable y replicable en diversas industrias. "Este desarrollo es un puntapié inicial, demostrativo y aplicado, que confirma que el hidrógeno verde ya no es solo una promesa de futuro, sino una solución tecnológica real, segura y adaptable a distintos procesos industriales", señaló su gerente general, Jorge Varas.
Luis Berríos, gerente general de Reduze, añadió que esta solución puede aplicarse no solo a la minería, sino también a sectores como el agrícola, vitivinícola, avícola, químico o incluso a sistemas domiciliarios y de edificios, reduciendo emisiones y costos energéticos.
Con la expectativa de que el costo del hidrógeno en Chile alcance los US$ 1,4 por kilo al 2030, según McKinsey & Company, este tipo de soluciones abre la puerta a una transición energética progresiva y realista, en la que el hidrógeno no será la única respuesta, pero sí un pilar fundamental dentro de un conjunto de tecnologías que acelerarán la descarbonización industrial. "El hidrógeno es parte de un abanico de alternativas para la descarbonización. Nuestra innovación permite soluciones modulares, fáciles de transportar e instalar, con un impacto técnico y económico significativo en el corto y mediano plazo," concluyó Berríos.