Miércoles 28 de mayo de 2025.- Nueve pescaderías y cinco restaurantes de la emblemática Caleta Riquelme de Iquique recibieron la certificación de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo, al culminar el primer Acuerdo de Producción Limpia (APL) implementado en una caleta pesquera a nivel nacional.
La iniciativa —impulsada por la Corporación Norte Pesquero y la Asociación de Industriales de Iquique y el Tamarugal— marca un hito en el avance hacia un modelo de desarrollo más sostenible, posicionando a Caleta Riquelme como referente en la adopción de buenas prácticas productivas, ambientales y de adaptación al cambio climático implementadas en toda la cadena de valor, desde la pesca artesanal hasta el sector gastronómico y de comercialización de productos del mar.
Como resultado, el 100% de los restaurantes participantes obtuvo la certificación de cumplimiento del APL y fueron inscritos en el Registro de Prestadores de Servicios Turísticos, fortaleciendo así a la caleta como un atractivo turístico y gastronómico regional. A partir del Acuerdo, el Servicio Nacional de Turismo puede promocionar turísticamente a Caleta Riquelme, de acuerdo a la ley de turismo 20.423.
"Que este certificado no sea un punto de llegada, sino un punto de partida. Que lo conseguido en Caleta Riquelme inspire a otras caletas del país. Que sigamos profundizando en la economía circular, en la trazabilidad de nuestros productos, en la promoción del turismo sostenible y en el fortalecimiento del tejido social que une a esta caleta", afirmó Ximena Ruz, directora ejecutiva de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo.
Impactos y logros del APL
Entre los principales logros del acuerdo se registra una reducción del 10% en el consumo energético, además de la elaboración de herramientas clave para la gestión sustentable del sector, tales como el Programa de Seguridad y Salud Ocupacional; protocolos específicos para pesca artesanal, pescaderías y restaurantes; y un registro de salud y seguridad en la actividad pesquera.
El presidente de la Corporación Norte Pesquero, Héctor Souza, señaló: "Asumimos el desafío de pilotear la implementación de un Acuerdo de Producción Limpia en una caleta pesquera en un escenario complejo como lo fue la pandemia de COVID-19. Logramos un aprendizaje en cuanto a la ejecución de estos acuerdos con comunidades de la pesca artesanal, y pudimos certificar la totalidad de restaurantes y pescaderías que se sumaron a este desafío".
La formación y la capacitación fue otro eje relevante del APL. Se realizaron diversos talleres dirigidos a las empresas adheridas sobre temas como inocuidad y seguridad alimentaria, buenas prácticas de manufactura, habilitación sanitaria, declaración de pesca, buceo seguro, manejo de residuos sólidos con enfoque de economía circular y responsabilidad extendida del productor. También se desarrolló la campaña comunicacional "Peligros de exposición a radiación UV de origen solar", liderada por el Instituto de Seguridad Laboral (ISL).
Este trabajo público-privado contó con el apoyo técnico de los ministerios del Medio Ambiente y Energía; la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura; el Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca) y la Seremi de Salud de Tarapacá. También participaron la Gobernación Marítima de Iquique, la Dirección Regional de Obras Portuarias y el Instituto de Seguridad Laboral.
El seremi de Medio Ambiente, Yerko Lima, enfatizó que "hay una hoja de ruta que se estableció a través de este Acuerdo de Producción Limpia. Fue arduo el trabajo; debemos reconocer que hay muchos cambios de hábitos que los pescadores tuvieron que aprender, especialmente en lo relacionado con la seguridad y el manejo de los residuos. Pero este es un inicio, para que puedan seguir desarrollando buenas prácticas tanto en el ámbito de la seguridad y alimentario, como especialmente en el medioambiental".
Gestión de residuos marinos
El Ministerio de Desarrollo Social financió el proyecto "Elaboración de un plan de manejo para reducir la pérdida y desperdicios marinos en las caletas de Arica, Riquelme y Antofagasta", que tuvo como objetivo fomentar la reducción, reutilización y reciclaje de los residuos marinos, a la vez que propuso generar nuevas fuentes laborales para enfrentar contingencias como la pandemia del COVID-19, mejorando la salubridad y el cuidado ambiental en estas caletas.
El APL "Caleta Riquelme Sustentable" nació en el marco del proyecto "Fortalecimiento de la Capacidad de Adaptación en el Sector Pesquero y Acuícola Chileno al Cambio Climático", impulsado por el Ministerio del Medio Ambiente y la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, con implementación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF). Caleta Riquelme fue una de las cuatro caletas piloto a nivel nacional.