Revista de descontaminación industrial, recursos energéticos y sustentabilidad.

GRAN COSECHA

GRAN COSECHA

Mejoras del sector forestal en gestión de residuos y uso de recursos.



En 1998 poco y nada se hablaba de responsabilidad ambiental empresarial en Chile. Y las acciones que se ejecutaban en este ámbito eran incluso más escasas. Por eso que el primer Acuerdo de Producción Limpia (APL) suscrito ese año por entidades gubernamentales y la industria de la celulosa, marcó un antes y un después en la apertura de los sectores productivos hacia la responsabilidad ambiental y el desarrollo sustentable.

Este rubro no sólo fue pionero en materia de compromiso ambiental, sino que además siguió siendo protagonista al suscribir otros dos APLs para aserraderos y remanufacturas, e igual número de convenios para papel periódico y tableros y chapas. Con ello se logró que el 100% del ciclo industrial forestal estuviera adherido a estos acuerdos. Por último, desde 2010 más de 50 pequeñas y medianas empresas madereras del Maule, de las áreas  de aserrío y remanufactura, trabajan para cumplir con los requerimientos del quinto APL que suscribe este importante sector de la economía nacional.

Cabe destacar que muchas empresas forestales han aprovechado a cabalidad este instrumento y se han certificado en producción limpia. Todas ellas son auditadas año a año para mantener la vigencia de su certificación en una operación normal y constante.

¿Qué medidas o acciones adoptaron estas organizaciones productivas para lograr una conducta ambiental acorde con las actuales exigencias? Con información aportada por la Corporación Chilena de la Madera (Corma), a continuación detallamos una parte importante de ellas fruto de los últimos APL en los que tales empresas han participado.

 Aserraderos y Remanufacturas

El APL dirigido a este segmento permitió la certificación de 52 plantas de 29 empresas, distribuidas entre las regiones del Maule y Los Lagos. Los principales ámbitos de trabajo y sus acciones concretas fueron:

·          Residuos sólidos:

- Implementación de planes de manejo para residuos peligrosos y no peligrosos.
- Suscripción de convenios de retiro o devolución de envases con los proveedores de aceites, solventes y plaguicidas.
- Reconocimiento de los subproductos generados en la industria, que antes eran considerados como residuos, produjo ganancias por su venta como materias primas para otros procesos. Con ello se lograron ahorros significativos por concepto de disposición final, dando como resultado un menor impacto ambiental.
- Ahorro en el consumo de producto anti mancha gracias a la Implementación de estanques de acumulación para el lavado y prensado de borras. Aquí se recuperaba una parte importante del producto que era nuevamente utilizado en el proceso, lo cual significó un ahorro entre un 10 a 15 % de producto anti mancha.

·          Uso eficiente del agua:

- Se modificaron los sistemas de riego fijo por aspersores móviles o, en su defecto, por sistemas de cierre autónomos -llaves de paso en cada aspersor de torre fijo-, con el objetivo de regar sólo donde habían trozos.
- Mejoramiento de los sistemas de acopio de madera en canchas de riego para optimizar la superficie a regar.
- Se construyeron sistemas para recuperar y reutilizar los efluentes.

·          Riles:

- Incorporación posterior al baño de una etapa de estilado para captar el líquido que escurre de las maderas.
- Implementación de zonas de acopio para la fijación del producto antimancha, las cuales cuentan con sistemas de captación de líquidos que son devueltos al proceso.

Lea este artículo completo en Revista InduAmbiente 123, páginas 118 a 121.